Y estoy de vuelta del viaje, bueno, volví hace unos días, pero ya se sabe como es la vuelta de los viajes.
Y que decir de mi viaje, pufff tendría tantas cosas que contar, la verdad es que ha sido una experiencia increíble, cierto que no es un viaje típico, que físicamente, si ser duro, si es cansado, tanto de ejercicio como de las comodidades a las que estamos acostumbrados en nuestra vida diaria, aunque ese tipo de viaje ya lo he hecho en otras ocasiones, y luego el grupo de gente con el que he compartido el viaje, que ha sido realmente estupendo todos y cada uno de ellos, empezando por nuestro guía Pablo, que realmente se lo ha currado, como por cada uno de los otros nueve que íbamos, como mi compañero de kayak David (al que conocí en este viaje), los tremendos hermanos Palacios, Enric con sus historias de la vida :), y su compañero Sergio, un gran tipo, Mireia e Ignasi los xics de Granollers con sus castells, Jesús el otro madrileño del grupo :P, y nuestra amiga portuguesa Carla.
Aunque no voy a contar el viaje completo, ya que sería muy largo, el viaje empieza con el vuelo Madrid-Copenhage, donde pasamos una noche en un hotel situado en una zona, ejem, un poco curiosa, ese mismo día ya conocemos más gente que va a otros viajes de Groenlandia con Tierras Polares, pero ninguno de nuestro viaje (había conocido a David en el aeropuerto), en fin, pasamos la tarde/noche por allí. Al día siguiente, bien prontito cogemos un avión en dirección Narsarsuaq, pero tras unas 4h de vuelo, el piloto nos dice que no puede aterrizar (allí van casi a ojo) por que hay nubes bajas, y nos lleva de vuelta a Copenhage :(, con lo que este día pasamos casi 12h de avión, y nos alojan en otro hotel en Copenhage.
Al día siguiente ya va la vencida, conseguimos aterrizar, e inmediatamente la gente de Tierras Polares que ya nos estaba esperando, nos lleva en zodiac (50km) hasta Narsaq, donde conocemos a Pablo nuestro guía, y preparamos los petates con lo que vamos a transportar durante los 11 días de kayak que tenemos por delante, sólo decir, que no llevamos barco de apoyo ni similar, todo lo que necesitamos, como comida, tiendas de campaña, ropa (muy poca), etc, lo llevamos en los kayak, ya que las zonas que vamos a «explorar» están inhabitadas, como «mal rollito», decir que llueve :(.
Y comienza el paleo, el primer día todo nos impresiona, además sigue lloviendo (aunque poco), con lo que el comienzo no es todo lo impresionante que podría ser, salimos de un punto rodeados de iceberg, ninguno de nosotros está habituado a viajes en kayak con lo que todo nos sorprende y nos cuesta a partes iguales, pero ya nos empezamos a dar cuenta de lo impresionante que va a ser. Las jornadas suelen ser de esta manera: desayuno entre 7:30-8:00, recogida de campamento y a las 9:00-9:30 más o menos salimos, depende del día y de la hacemos más o menos horas de remo, pero suelen ser 3 ó 4, hasta las 5 más o menos los días «largos», un par de días también hacemos algún trekking (unas 5h), y un día de los de trekking descansamos de remo, montar campamento, luego cena prontito a eso de las 20:00, y luego en el «tipi» (la tienda principal) a escuchar las divertidísimas historias de David, Enric, y el resto. En fin, no voy a detallar día a día, eso ya os lo contaré con unas cervezas delante
Y el viaje acaba dónde empezamos, tras unos 160km en kayak, con algunos trekking, volvemos a Narsaq, donde pasamos un par de noches antes de volver a Copenhage la última noche y de ahí a Madrid.
Cosas interesantes, realmente los paisajes son espectaculares, los iceberg, el inlandis, el comer pescado (bacalao y salmón), no sólo fresco del día sino pescado hace media hora por nuestros pescadores oficiales, David y los hermanos Palacios (que grandes Alberto y Javier), pero sobre todo el haber compartido esos días con un grupo de gente divertidísima que estoy encantado de conocer y que espero volver a verles (a ver si vamos al pueblo de Jesús), de verdad chavales, el viaje no habría sido lo mismo sin todos y cada uno de vosotros, y por supuesto el guía, que ha estado en todo momento pendiente de nosotros y nos ha cuidado con su información, cocinando, calentando agua cuando más nos apetecía, y que nos ha llevado estupendamente.
Y me dejo muuuuchas cosas y muuuuchas anécdotas e historias por contar, pero sin unas cervezas delante no es lo mismo :).
Así que gracias a todos vosotros por hacer de este un viaje realmente increíble.
Por supuesto las fotos las tenéis en el link de arriba tanto en el de fotos como en el directo a Flickr.